La Declaración de la Coalición Chagas

La enfermedad de Chagas mata silenciosamente. A lo largo de las Américas, se estima que más de 6 millones de personas, la mayoría de los cuales son pobres y marginados, están infectados por este parásito mortal. Los niños se ven particularmente afectados. Con la globalización, la enfermedad se encuentra cada vez más en los Estados Unidos, Europa, Australia y Japón. EE.UU. es ahora el séptimo país más afectado en todo el mundo. Decenas de miles de pacientes mueren cada año por la enfermedad de Chagas. Alrededor del 30% de las personas infectadas crónicamente desarrollarán complicaciones del corazón con alta probabilidad de muerte. Menos de 0.2% reciben tratamiento hoy en día. Nuevos problemas surgen especialmente con la transmisión materno-infantil, lo que podría convertirse en la nueva cara de Chagas.
 
Chagas es una crisis oculta de salud pública que necesita urgentemente mayor atención.
 
Como investigadores, médicos, pacientes, donantes,  sociedad civil y profesionales de la salud pública dedicados a la investigación y desarrollo (I + D), a la aplicación del tratamiento y la prevención programas, hemos decidido unir fuerzas para crear una coalición dirigida a cambiar el futuro de La enfermedad de Chagas.
 
Desde 2009, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) han desarrollado planes estratégicos de apoyo a los programas nacionales de control en endémica países. Otras iniciativas recientes “Uniting to Combat Neglected Tropical Diseases London Declaration” han incluido la enfermedad de Chagas como una prioridad.
 
Este contexto representa una oportunidad sin precedentes para ayudar a definir una agenda centrada en el paciente que impulse el acceso a las herramientas y tratamientos de salud existentes, a la vez que los esfuerzos globales para estimular la innovación de nuevas y mejoradas herramientas para el control de la enfermedad de Chagas.
 
Hacemos un llamado para:
 
  1. Acceso: Es hora de tratar facilitando el acceso a herramientas de salud existentes en las zonas endémicas y asegurando un fuerte compromiso político de los países afectados. La enfermedad de Chagas es una emergencia. Hay una necesidad urgente de mejorar la prevención de todas las formas de transmisión, salvar vidas, mejorar la calidad de vida de las personas infectadas, y evitar los enormes costes relacionados con la progresión de la enfermedad en los pacientes, familiares, cuidadores, médicos y los sistemas de salud individuales.
  2. Innovación: Necesitamos una agenda de investigación y desarrollo (I+D) global que establezca las prioridades, identifique  lagunas, y coordine los esfuerzos de la comunidad de I + D (academia, organismos multilaterales, donantes, el sector privado, los institutos públicos, gobiernos) hacia  metas e hitos claramente definidos en relación a las  necesidades de medicamentos, diagnósticos, vacunas y otras tecnologías sanitarias esenciales.
  3. Control de Transmisión: Es obligatorio seguir trabajando hacia la prevención de las diferentes formas de transmisión en los países endémicos y no endémicos.
  4. Incidencia: La conciencia pública y política de la enfermedad de Chagas se debe aumentar de inmediato; la movilización de apoyo político con recursos financieros y técnicos debe convertirse en una prioridad.
Es momento de unir fuerzas y establecer sinergias. La Coalición Global de la Enfermedad de Chagas es una alianza de colaboración abierta y ambiciosa en donde juntos, a través del intercambio de experiencias, conocimientos, y capacidad de acción, esperamos lograr el objetivo de aliviar el sufrimiento humano causado por Chagas y en última instancia, el control de la enfermedad de Chagas de una vez por todas.
 
Instituciones fundadoras:
 
Federación Internacional de Pacientes “FINDECHAGAS”, DNDi, Baylor College of Medicine, Hospital Infantil de Texas, Fundación Mundo Sano, CEADES, e ISGlobal.